A pesar de los increíbles avances en la investigación de una cura definitiva contra la infección por VIH, los científicos piden a la sociedad paciencia porque todas las líneas de investigación abiertas (medicamentos anti-reservorios, terápia genética y vacunas terapéuticas) llevan tiempo en su investigación y desarrollo.
Para los que revisamos y difundimos los avances en las investigaciones sobre la cura del VIH causa mucho optimismo las noticias que no cesan de producirse con meses o incluso días entre una y otra, pero al mismo tiempo somos conscientes y es nuestro deber y responsabilidad advertirle a nuestros lectores y pacientes que todos estos avances son pequeñas piezas de un gran rompecabezas que tardará años en completarse.
Vemos con ilusión el avance de las terapias genéticas, primero la de Sangamo, ya avanzada, y ahora la de segunda generación, en fases iniciales. También la aparición de nuevas vacunas terapéuticas prometedoras como la del Dr. Picker que incluso podría generar una cura funcional de la infección. Sin embargo debemos ser conscientes de que todas esas estrategias tomarán años en estudiarse y en verificar que son seguras y efectivas para luego poder suministrarlas a los pacientes.
Mientras tanto tenemos que conformarnos, y no es poca cosa, con unos tratamientos cada día más efectivos, potentes, con menos efectos secundarios y más fáciles de tomar. Algunos científicos como Robert Siliciano afirman que los tratamientos de hoy en día ya representan en sí mismos una especia de cura funcional si tomamos en cuenta lo mucho que han mejorado y su alto grado de efectividad.
Tendremos que esperar con paciencia 3 o 4 años para poder ver la cosecha de todas estas estrategias muy prometedoras pero aún en fases iniciales de investigación. Mientras tanto sigamos luchando en mejorar el acceso a los tratamientos a aquellos que lo necesiten y en reforzar la prevención, es la mejor manera de llegar hasta ese futuro prometedor.